Una buena higiene bucal incluye limpiar los dientes, la lengua y las encías. Esto es esencial para prevenir enfermedades. La acumulación de placa bacteriana en las encías puede provocar problemas de salud como la recesión de las encías y afecciones más graves como la gingivitis y la periodontitis.

El curetaje dental o raspado radicular es un tratamiento realizado por un periodoncista y diseñado para eliminar dichas bacterias mediante una limpieza profunda. De esta forma se previene el malestar y la dolencia en las encías.

En Clínica Dental Puerta de Toledo realizamos este tipo de tratamiento para detener la progresión de la enfermedad periodontal y prevenir daños permanentes, como las los surcos en las encías, causados ​​por la enfermedad periodontal.

El curetaje dental es poco invasivo y no tiene efectos secundarios. Aún así, recomendamos algunas medidas de cuidados después de realizar el tratamiento:

• Cepíllate suavemente durante las primeras 24 horas después del curetaje ya que las encías están más sensibles.
• Es normal que las encías sangren durante unos días después del tratamiento, pero el sangrado desaparecerá una vez que la inflamación disminuya.
• En el caso de que fumes, evita hacerlo hasta pasadas las 48 horas después del tratamiento.

Por otro lado, es importante distinguir entre el curetaje dental y la limpieza. Ambos tratamientos se encargan de eliminar los residuos bacterianos, pero el curetaje está destinado a pacientes con periodontitis. Los pacientes con buena salud dental pueden seguir una rutina de limpieza.

En cualquiera de los casos, en Clínica Dental Puerta de Toledo, tu clínica de referencia del centro de Madrid, nuestros expertos, dirigidos por el doctor Gonzalo Fernández Alonso, están siempre disponibles para ayudarte y asesorarte. No dudes en contactarnos.